El tiempo es un concepto relativo: hay segundos eternos y días fugaces. La interpretación del devenir del reloj se relaciona a la realidad que a cada uno le toca vivir, por lo que la percepción siempre es subjetiva. ¿Cómo definir este primer año de Gobierno libertario y sus implicancias para Córdoba?
La sensación es que cada segundo de este 2024 duró una eternidad. Entender las razones es más complejo. Hay que cruzar los datos objetivos de una economía que se cae a pedazos con la subjetividad de miles de cordobeses que aparecen atrapados en un síndrome de Estocolmo colectivo.
Uno de los datos más fuertes del primer año de los libertarios en el poder es el crecimiento de la pobreza en la provincia, proceso en el que tuvo un rol clave la caída del poder adquisitivo de la mayoría de la población.
Un estudio del Departamento de Economía de la Universidad Torcuato Di Tella -en base a los datos de la Encuesta Permanente de Hogares del INDEC- comparó el primer semestre del 2023 con los primeros seis meses del año libertario. En el Gran Córdoba la pobreza pasó del 36,7% al 51%, un crecimiento por encima de los 14 puntos porcentuales. En Río Cuarto el proceso fue todavía peor: pasó del 31,4% al 53,5% (la suba estuvo por encima del 21%).
Con la indigencia ocurrió algo similar. Córdoba capital pasó del 8,9% en los primeros seis meses del año pasado al 20,3% actual. En el imperio del Sur el salto fue del 8% al 13,1%. A veces los porcentajes no ilustran la magnitud del problema: se trata de miles de cordobeses que se cayeron del sistema en algunos meses de gestión y no está claro si podrán volver al entramado social que los acaba de expulsar.
Puede parecer un poco obvia la explicación del proceso, pero vale la pena refrescarla: la inflación bajó en los últimos meses, es cierto, pero los salarios nunca recuperaron la pérdida que provocó la devaluación del 118% aplicada en diciembre del 2023. De manera que en los últimos meses los bienes aumentan menos en su valor nominal pero los sueldos siguen estando por debajo en su capacidad de consumo.
Veranito financiero
La disminución del proceso inflacionario es celebrada por la “Casa Rosada” como su mayor logro económico y los números así lo confirman. Córdoba está enfrentando los valores mensuales más bajos de los últimos tres años. Pero el poder adquisitivo de los cordobeses se desplomó. Y no se trata de una sensación, como dice el presidente. Los datos de la Cámara de Comercio de Córdoba son elocuentes: su Observatorio Comercial de octubre pasado precisó que las ventas minoristas -que incluyen comercios y shoppings- registró una caída del 14% en cantidad de unidades vendidas. Y un dato todavía más impactante: disminuyó el 11% la rentabilidad de los comerciantes.
El mismo estudio deja en evidencia que tampoco se produce la recuperación económica en “V” ni se elevan los gases producto de los problemas gastrointestinales del buzo al que suele citar el hermano de Karina Milei. Al comparar intermensualmente octubre de este año con septiembre del 2024, los valores determinan una caída del 12% en la cantidad de unidades comercializadas y de un 9% en la rentabilidad de los empresarios. “El 68% de los comerciantes no cumplieron con sus expectativas”, informa el organismo (aunque no aclara si se refiere a las operaciones comerciales o a cómo votaron en los comicios del 2023).
En esa misma línea se puede observar lo que está pasando con el empleo. En el tercer trimestre del 2024 la desocupación llegó al 8,2% en la ciudad de Córdoba, pero la cantidad de personas que tienen un trabajo pero buscan otro se disparó al 28,2%. Claramente no se trata del fervor por trabajar más horas: como el sueldo no alcanza, hay que salir a buscar una segunda o tercera fuente de ingresos para poder llegar a fin de mes. El agro, en alza Como en todo modelo económico, también hay grandes ganadores: los sectores exportadores de materias primas -especialmente el agro y las mineras- son las grandes favorecidas de estos 12 meses de ideas austríacas. A pesar de que el dólar sigue retrasado y cada vez piden de manera menos sutil una devaluación, los números marcan una importante recuperación de estos rubros. Aunque en el caso del agro cualquier comparación con 2023 queda desvirtuada por la feroz sequía del año pasado.
Sin embargo, esa recuperación no ocurre en otros sectores vitales de la economía cordobesa como las automotrices y turismo. Durante el año fueron una constante las suspensiones y despidos en el sector. El caso de la empresa Lear, en San Francisco, con la caída de 350 contratos, fue el último de fuerte repercusión mediática. Quien lo explicó muy bien fue el secretario de prensa del gremio SMATA, Javier García: “En las concesionarias caen las ventas de fabricación nacional, entonces eso tiene su repercusión en las fábricas. Se ha ido negociando, llegando a muchos acuerdos, mejorando y arreglando desde el Sindicato las mejores condiciones que se podían para tratar de que en algún momento haya alguna mejora. Pero hasta ahora no se está viendo, al contrario, está muy complicado”, le dijo al sitio Infogremiales.
En turismo la temporada 2024 fue mala y la gran duda es qué pasará en 2025. El principal problema son los precios relativos. Argentina está muy cara para los argentinos -entonces baja el turismo interno-, pero también para los extranjeros, que encuentran precios exorbitantes en dólares.
El INDEC viene informando mes a mes que aumenta la cantidad de turistas que viajan fuera del país por encima de la recepción de viajantes. La relación alcanzó 1,3 turistas argentinos que viajan al exterior por cada turista extranjero que arriba al país. Este verano pinta para que la alegría sea solo brasilera.
Tóxicos Desde diciembre los medios hegemónicos hacen malabarismos para disfrazar con eufemismos el nombre de una oposición que no es tal. “Amigable”, “dialoguista” y “conciliadora” son algunas variantes de una sola realidad: no fueron opositores en este primer año de gestión.
Es tan extraño el proceso que cuesta encontrar diferencias en la relación que mantienen con el Gobierno nacional con dirigentes enfrentados a nivel local como el diputado Rodrigo De Loredo, el senador Luis Juez o el propio gobernador Martín Llaryora.
Más allá de los motivos políticos, sociológicos o psicológicos del vínculo que construyó El Panal con la Casa Rosada en estos 12 meses, en lo económico fue todo pérdida para los cordobeses. Igual, los legisladores mediterráneos acompañaron siempre al Gobierno nacional en el Congreso.
Como muestra de esta relación tóxica sobra un botón: la Caja de Jubilaciones de Córdoba. Durante el Gobierno del Frente de Todos –donde Schiaretti acudió a la Corte Suprema- la discusión era como actualizar los montos. Con Milei directamente no llegó ni un peso. La Nación prevé gastar 254 millones de pesos para todas las cajas previsionales provinciales en el Presupuesto 2025 que está debatiendo el Congreso. Solamente Córdoba tiene un déficit mensual de 20.000 millones de pesos.
El otro problema estructural de la Provincia es la deuda externa tomada en dólares. Córdoba tiene más de un 98% de sus compromisos asumidos en la moneda extranjera. La devaluación de diciembre del año pasado generó que en cuestión de horas esos compromisos aumentaran un 118% en pesos. Y si bien Llaryora logró evitar el default en 2024, la deuda sigue siendo un problema irresuelto y la necesidad de acceder a dólares oficiales con autorización del Estado nacional también explica la extraña relación del cordobesismo con Milei.
El Gobierno provincial está en un círculo vicioso: le prometen cosas que no le cumplen, pero le dicen que será distinto, que cambiarán, que fue la última vez. Pero todo vuelve a empezar porque en una relación tóxica nada cambia.
Año nuevo ¿Vida nueva? La pregunta por estas horas es: ¿Y si a Milei le sale bien?
Esa pregunta esconde una definición central: ¿Qué significa que le salga bien?
El año próximo año el Estado tiene que enfrentar pagos de deuda externa por 27.000 millones de dólares. Cuando el presidente afirma que “el déficit cero no se negocia” lo que en realidad está diciendo es que hará el ajuste que sea necesario para garantizar el pago de esa deuda, como ocurrió en su primer año de gestión.
Esa definición de política macro económica es la clave para entender cómo será el 2025: el eje seguirá siendo asegurarle a los acreedores el pago de la deuda. Haberes jubilatorios, obra pública, salarios o baja de impuestos quedarán subordinados a esa prioridad.
¿Le puede salir bien a Milei? El primer año económico del Gobierno libertario marcó ganadores y perdedores: la deuda se pagó, el blanqueo de capitales favoreció a las grandes fortunas -que pudieron ingresar dinero que no tenían declarado ante el fisco- y la explotación minera pasa por un gran momento. Mientras tanto en Córdoba hay más pobres, más desocupados, el consumo sigue cayendo y los problemas estructurales de la provincia se profundizaron.
Pese a la debacle económica, la sociedad parece anestesiada, como si el odio al peronismo y el fracaso de la última gestión del Frente de Todos bastaran para soportar cualquier cosa. Incluso vivir en libertad… condicional.