"Regionalizar el basural de la ciudad implicaba que treinta y un municipios aledaños del noroeste cordobés trasladaran sus residuos a esta ciudad sin una planificación adecuada para acopiar cantidades de ese calibre". En exclusiva para El Sur, Ana Martínez Calvetti traza las principales problemáticas que atraviesa actualmente la ciudad emplazada en el noroeste cordobés en materia ambiental, problemáticas que impactan directamente en los índices y condiciones sanitarias de sus habitantes.
¿En qué consistió la fallida ordenanza 153/20?
Fue una ordenanza aprobada entre gallos y medianoche que generó un rechazo espontáneo en la comunidad. Gracias a la movilización de alrededor de 5000 ciudadanos logramos que el intendente dé marcha atrás y la derogue, para continuar tratando solamente nuestros residuos que comprende el ejido municipal. Posterior a este polémico episodio, el intendente cedió la recolección de residuos a una empresa privada (IMACOR S.A.) de forma irregular. Esto es así a tal punto que, al día de hoy, nuestros abogados no pueden acceder al contrato ni a los resultados del llamado a licitación pública.
¿Ustedes tuvieron alguna participación durante este proceso?
Sí. Inicialmente la movilización grande sucede porque desde nuestras redes empezamos a viralizar la intención del concejo deliberante de aprobar el proyecto de espaldas al pueblo. Logramos enterarnos de manera informal que nuevamente se quería regionalizar nuestro basural, básicamente para ser el basural ampliado de la región. Recuerdo la grata sorpresa que nos llevamos esa mañana de jueves en las puertas del concejo deliberante porque asistieron muchos trabajadores de la ciudad.
Es importante destacar que hay un fantasma alrededor de este asunto porque durante la gestión del ex intendente Mario Blanco, se intentó regionalizar el basural a través del programa provincial "Córdoba limpia". Y el repudio de la comunidad en aquel entonces fue absoluto. Pero los pocos fondos que desembarcaron para infraestructura y maquinaria, quedaron abandonados en el predio del basural. Es por eso que presentamos un proyecto junto a "Quino arquitectura" que se rechaza, no desde la formalidad sino por la presión empresarial de IMACOR S.A. que comparte intereses con el municipio. Nosotras creemos que rechazar la actividad del basural es imposible, pero sí rechazamos que la irregularidad de una empresa privada avale la instalación de un basural que concentre los residuos generados por treinta y dos municipios.
¿Cuál es la realidad socioambiental en Cruz del Eje?
El año pasado hicimos una encuesta en la ciudad para conocer la cantidad aproximada de basurales a cielo abierto que existen y pudimos reconocer treinta y dos focos en plena urbanidad. Partiendo desde ese punto, la realidad es abrumadora y desesperante. Nuestro basural principal conocido como “pozo cavado”, fue tercerizado a una empresa privada que a pesar de contar con máquinas y estructura edilicia para tratar los residuos, los sigue enterrando.
En materia de políticas ambientales, contamos con una ordenanza municipal aprobada por unanimidad que avala la creación de una dirección de ambiente, la cual todavía no existe. Podría seguir nombrando las falencias nocivas de la no gestión del gobierno actual de Cruz del Eje, pero volviendo a la pregunta, la realidad socioambiental de esta ciudad del noroeste es preocupante.
¿Quiénes son los más afectados por esta actividad?
Quienes conviven con los basurales al lado de sus casas se llevan la peor parte. Inhalan el humo de la quema de residuos, soportan el olor putrefacto y respiran el aire contaminado. Muchos barrios tampoco cuentan con el servicio de recolección de residuos y se ven obligados a quemar en el patio o en la vereda de sus casas la basura que generan. Este panorama es alarmante porque entendemos que los problemas ambientales son transversales. Una buena política ambiental es también una política de salud preventiva para sus ciudadanos, esto tiene que entenderse así.
¿Alguna vez publicaron informes de impacto ambiental?
Desde octubre de 2019 venimos solicitando estudios de impacto ambiental y nunca nos brindaron esa información, jamás. De hecho, pudimos acceder al plan de acción de la empresa por un error administrativo que cometieron ellos, a pesar de haber tenido una reunión con los directores de IMACOR S.A. donde les pedimos esta información. Allí estaba publicado el estudio ambiental del año 2004, no el actual. Posteriormente, el tribunal de cuentas publicó, al cumplirse un año de la instalación de esta empresa en el predio, que adeudaba dinero porque no ejecutaron los fondos previstos, es decir que la irregularidad es total.
¿Qué respuestas exigen desde ECOCDE?
Desde ECOCDE exigimos el compromiso efectivo con las obligaciones asumidas a la hora de gobernar. Nuestro derecho a vivir en un ambiente sano y limpio nos moviliza a seguir insistiendo en cuestiones básicas como: una recolección correcta y eficaz de residuos; la conformación de una mesa ambiental donde vecinos y organizaciones puedan ser parte; la regulación del basural pozo cavado; la búsqueda de soluciones frente a problemas graves de contaminación del río por escombros y el cumplimiento de las normas y ordenanzas aprobadas como la ley Yolanda; no uso de bolsas plásticas; la efectiva conformación de la dirección de ambiente. Este es el piso del cual partimos.
¿Articulan con sectores organizados?
Sí, actualmente trabajamos junto a la corriente política y social "La Colectiva" en relación a la promoción ambiental. Con el "MTE cruz del eje" en proyectos de recolección diferenciada. La "Fundación AVI" (Agregando Valor Institucional) y con el consorcio de riego de la ciudad desde la iniciativa “cuidando nuestro canal”. También desde el programa radial “Hablando en chuncano” de la radio central ferroviaria que se transmite los viernes.
Nos parece fundamental la difusión de nuestra postura frente a las problemáticas mencionadas y la comunicación de las acciones que llevamos adelante. Contamos con el apoyo y disposición de locales comerciales que funcionan como puntos donde recibir ecobotellas. Logramos llegar a escuelas de nivel primario y secundario de la ciudad que promovieron por primera vez la importancia de reciclar residuos y también a vecines que se suman en las diferentes actividades.
¿Cómo te gustaría que sea la ciudad en unos años?
Percibimos una voluntad de cambio en la comunidad cruzdelejeña. Lo vemos en cada decisión o acción que impulsamos. Entendemos necesaria, más allá de todas las voluntades, la acción concreta de un Estado presente y comprometido con el ambiente.
Si hablo desde el deseo de un futuro con ECOCDE, me gustaría que en unos años nuestra preocupación principal no sea la gestión de basurales a cielo abierto por toda la ciudad. Como militante de una organización feminista, la justicia social es una premisa que abrazo al momento de emprender cualquier cambio. En ese sentido, me gustaría que ECOCDE sea partícipe de una ciudad más equitativa. Que el acceso al agua potable, la vivienda digna y la posibilidad de vivir en un ambiente limpio no sea privilegio de unxs pocos. Que los problemas ambientales, transversales a todas estas esferas, sean parte de la agenda política en primera instancia.