Cuando Alexa tuvo frente a la fiscal Analía Gallarato ya sabía, tras el accidente de las Altas Cumbres del 29 de octubre pasado, que quedará parapléjica de por vida. El impacto la dejó sin movilidad de la cintura para abajo y el responsable es Oscar González, caudillo de Traslasierra, varias veces ministro de la Provincia, legislador y en los últimos tiempos presidente provisional de Legislatura y tercero en la línea de sucesión constitucional.

A pesar de las prevenciones que despierta en el oeste cordobés sólo nombrar a González, a quien la gente llama simplemente OG cuando se trata de comentar algo en voz baja, la adolescente contó lo que recordaba del siniestro donde murió la docente Alejandra Bengoa, que conducía el coche con que trepaba mansamente la cuesta para subir a las Altas Cumbres, y quedó gravemente herida su amiga Marina, hija de Alejandra. Alexa le pidió crudamente a la fiscal: “Meta preso a Oscar González”. Lo contó su papá Alejandro a los medios que esperaban el fin del trámite judicial en la puerta del Hospital de Niños.

Si el pedido fue espontáneo o pensado no importa. Por un lado, representa el anhelo de muchos que están cansados de varias décadas de liderazgo caudillesco de Oscar González, dentro y fuera del peronismo, que se desmorona como un castillo de arena ante las olas del escándalo. Por el otro, se suma a la lógica penal que desarrolla como litigante por la querella de las familias afectadas el abogado Germán Romero Marcón.

En una larga entrevista con revista El Sur, el abogado de las víctimas relata los pormenores del caso y adelanta algunas de las medidas que piensa impulsar ante la Fiscalía para que González pague por sus responsabilidades sobre la muerte de la docente Bengoa y las graves secuelas de las dos chicas que la acompañaban, sucedidas en el paraje Niña Paula, a pocos kilómetros de Mina Clavero.

Romero Marcón impulsa un cambio de carátula, denuncia que funcionarios de salud retrasaron el traslado de las chicas a Córdoba para su internación y se pregunta cómo el auto robado que utilizaba González apareció en Villa Dolores, tierra del caudillo, donde fue secuestrado por la Justicia.

- ¿Cómo fue la declaración de Alexa?

-Dijo lo que ocurrió: que Alejandra era una conductora responsable e iban todas juntas a un concierto a Córdoba, todas con el cinturón. Que condujo bien, que nunca cambió de carril, que conducía a baja velocidad y que las chicas iban atrás escuchando música con sus celulares. De pronto, relató, vino de frente el auto negro y los impactó. Alejandra alcanzó a gritar “hijo de puta” un instante antes del impacto. Terminaron dándose vuelta. Alexia va a ampliar su declaración en función de que recuerde más y Marina también va a querer hablar en algún momento. Pidió que lo metan preso a González porque no entiende por qué le pasó esta tragedia y nada le sucedió al que la causó. De hecho, recuerda que cuando salió del vehículo estaba a un lado y no las ayudó, mientras otras personas las asistían. González nunca se acercó. Otros testigos aseguran que el legislador hablaba por teléfono apenas salió el auto por sus propios medios.

- ¿Sabe a qué velocidad venía González?

-Eso lo va a determinar nuestro perito Nelson Castillo, pero seguro que venía a mucho más de cien kilómetros por hora. El auto de Alejandra dio un tumbo al menos. Tenemos un perito experimentado que trabajó en el Estado nacional, ex oficial de inteligencia de Prefectura, un tipo que sabe y es profesor de la Facultad de la Policía Federal Argentina, justamente de accidentología, y ya evaluó que la responsabilidad es cien por ciento de González. El impacto es sobre el carril donde iba Alejandra, en dirección a Córdoba. Ahí están los restos, el impacto, los fluidos, así que es imposible que se haya cruzado de carril. Al momento del impacto González está superando a otro vehículo en zona de doble línea amarilla (que prohíbe el sobrepaso), porque de lo contrario no se justifica que haya cambiado de carril.

- ¿Cómo intervino la policía después del accidente? ¿Fue rápida?

-Hay un sargento de la Caminera que llega primero, pero pasado un largo tiempo. González tuvo fácilmente 50 minutos para organizarse hasta que la policía interviene el lugar. Y aun después siguió teniendo espacio para maniobrar porque la fiscal nunca llegó por no estar de turno y la secretaria de la Fiscalía llega tres horas y pico después, con lo cual eso fue tierra de González.

- ¿Durante esos 50 minutos que estuvieron sin ninguna autoridad presente tampoco asistió González a las chicas, a pesar de ser médico?

-En ningún momento las asistió, al contrario, hablaba por teléfono. Después uno entiende por qué lo hacía, estaba preocupado por sus bolsos, por la prueba, por dónde se iban a quedar las chicas, en qué hospital. Hay constancias en la causa de que, en el hospital de Mina Clavero, estaba el director del Hospital de Villa Dolores, su amigo personal Juan Uez. A su vez, las constancias establecen que no querían llevar a las chicas a Córdoba, sino que pretendían internarlas en Villa Dolores. ¿Qué hacía Uez en Mina Clavero? O fue a dar directivas respecto a las chicas o respecto a la extracción de sangre de Oscar González.  Como dijo el padre de Alexia, se retrasó el traslado de las chicas a Córdoba, especulando con que fallecieran, porque eran dos testigos menos.  Si las chicas terminaban en Villa Dolores fallecían sin lugar a dudas porque ahí no hay alta complejidad, no está preparado como en los hospitales de la capital. De hecho, todos los análisis de sangre y demás que son necesarios en Villa Dolores se mandan a realizar a Córdoba, porque el hospital no tiene cómo hacerlo. Y se envía a un laboratorio privado que sería de una hija de González.

- ¿Como es el encuadramiento legal?

-En principio, y hasta el momento, se trata de homicidio culposo agravado, con una pena máxima de seis años, y lesiones culposas agravadas. Pero nosotros vamos a demostrar que este caso es un dolo eventual sin lugar a duda. Un homicidio simple con pena de 8 a 25 años.

- ¿Como justifica el cambio de carátula que impulsa?

-Porque González realizó una conducción temeraria desde que salió de Córdoba. No respetó el tiempo normal para recorrer el trayecto desde la salida del peaje hasta el lugar de impacto, lo que significa que la velocidad fue ampliamente superada de los límites establecidos para ese tramo. Además, todos los testigos convocados dicen que González los rebasó. No fue la violación de la norma una sola vez, únicamente durante el impacto. No, vino violando la doble línea amarilla desde Córdoba. También hay testimonios de policías de la Caminera, en el retén de control en las Altas Cumbres, donde un agente le dice al otro ‘ese es el auto de González’ y el segundo responde ‘no, González ya debe estar en Villa Dolores porque hoy hay elecciones en la cooperativa. Además, González va mucho más rápido, así que tuvo que haber pasado’. Cada vez que lo paraban por exceso de velocidad, bajaba la ventanilla y decía ‘soy el doctor González’. El tercer elemento es la forma del impacto, al cambiar de carril en zona prohibida; cuarto, la implantación de testigos falsos que pretenden hacer actualmente para embarrar la investigación y sembrar dudas sobre Alejandra Bengoa, una de las víctimas; quinto, la manipulación de la prueba cuando sacaron los bolsos del baúl de su auto, hecho que es motivo de una causa federal paralela que investiga el fiscal (Maximiliano) Hairabedián; sexto y último, está la omisión de deber de cuidado porque González es médico y no socorre a las víctimas. Sin lugar a dudas eso constituye abandono de persona. Él podría aducir que estaba lastimado o shockeado, pero se bajó del auto por sus propios medios e inmediatamente se puso a hablar por teléfono. O sea, tan shokeado no habría estado.

-El abogado de González dice que nuevos testigos pueden cambiar radicalmente la causa. ¿Qué puede comentar al respecto?

-Cuando se demuestre que son testigos plantados ahí va a haber una demanda más. Desde el primer momento el abogado de González dijo que ‘la que cambió la trayectoria fue la señora’, estos testigos dicen que Alejandra cambió de carril en el lugar del impacto, pero es imposible: una persona que es cuidadosa, que va despacio en forma ascendente, con dos nenas atrás y siendo madre sola, habría querido superar un camión a 60 kilómetros por hora. Curiosamente estos testigos son las mismas personas que asisten a González en el lugar del impacto y tocan los bolsos. Son la sobrina del legislador y una amiga de ella. Dicen que casualmente estaban justo atrás de Alejandra. Transcurrida una hora llegan al lugar y sacan los bolsos del auto, frente a la policía que no hizo nada para evitarlo, pero habrían visto como manejaba Alejandra... Es inverosímil. Al punto que la novia de González, que estaba en Villa Dolores, llegó al sitio del choque antes que estas chicas, testigos plantados.

- ¿Como valoran ustedes la intervención policial?

-El hilo siempre se corta por lo más delgado. El jefe del operativo seguramente pasará a disponibilidad por el tema de los bolsos y quedará ahí. Es un jefe aun no identificado, pero hay constancias en la causa que intervino también y dio directivas el jefe de la Departamental San Javier, que se llama Gabriel Díaz y es amigo íntimo de González. Díaz no debió estar ahí porque por jurisdicción, debía intervenir la Departamental San Alberto.

- ¿El carnet de conducir de González suma un elemento agravante para su situación?

-No debió sacarlo en Las Tapias. Él tiene domicilio en Córdoba Capital o eventualmente podría haberlo tramitado en Villa Dolores. En Las Tapias no existe la ley, tenés una intendenta que no adhiere al sistema de multas y está denunciada por varios delitos. Para la Municipalidad es una falta administrativa, pero cuando se unan los hilos, en la etapa probatoria, y vean que hay una persona que tiene multas por doquier, que saca un registro de dudosa legitimidad en un lugar donde no hay ningún tipo de control y es tierra de nadie, se sumarán elementos para establecer la ‘conducción temeraria’. Lo real es que nunca iba a sacar el carnet en un lugar donde corresponde y con controles porque se trata de una persona que manejaba muy rápido, que conducía un coche robado con la patente adulterada, con un seguro que no sabemos si va a responder o no. Todo un sistema de impunidad que encubre y protege al caudillo. El seguro se llama El Norte y sólo tiene oficinas en San Francisco. Hay que ver qué acuerdo tienen con el Gobierno porque no revisaron al auto, o no lo hubieran asegurado. Porque no podés asegurar un auto robado.

- ¿Como es la situación del vehículo que conducía González?

-Es un vehículo de la aseguradora La Caja porque fue robado en provincia de Buenos Aires, el seguro le pagó el valor del coche a su dueño y cuando aparece el auto robado pasa a propiedad de La Caja, como hacen en todas las compañías de seguros. Sin embargo, estaba en poder de González porque así se lo asignó el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) a la Legislatura. No me preguntes cómo, pero ese auto aparece en Villa Dolores cuando fue robado en Buenos Aires. Informada la justicia la causa del coche va a la Fiscalía N°1 de Villa Dolores, a cargo de Lucrecia Zambrano, que dicen que es ahijada de González. ¿Quién hizo nombrar a Zambrano? González. La fiscal manda el auto al TSJ, que a su vez lo deriva a la Legislatura, donde lo toma González. Todo muy oscuro.

-A los pocos días del accidente se supo que un BMW de igual modelo, pero de pintura blanca, tenía la patente original y recibía cantidad de multas en provincia de Buenos Aires, que se habían labrado en Córdoba.

-Le llegaron muchísimas multas al dueño de la camioneta original. De hecho, ese señor vino a Córdoba y buscó un productor de seguros, que es su amigo, para averiguar dónde estaba domiciliado el coche con la patente clonada. A través del sistema de búsqueda llega a un domicilio en calle San Lorenzo, en Nueva Córdoba. Incluso filma el coche e inmediatamente va a hacer la denuncia en la Policía y la misma Policía no se la toma. La policía fue a constatar, cuando vieron que era el domicilio de Oscar González, le negaron radicar la denuncia. Por eso, el hombre fue a la Justicia federal y radicó la denuncia en el Juzgado Federal N°3 de La Plata, de donde es oriundo. Y de La Plata pasaron el caso a la Justicia Federal de Córdoba, donde quedó dormida en la Fiscalía N°2, a cargo del doctor Carlos Casas Nóblega, que a su vez fue integrante de la Cámara del Crimen de Villa Dolores. Todo vuelve al principio.

- ¿Por qué la familia pide la renuncia y el desafuero de González?

-El pedido de desafuero es algo que debe resolver la Legislatura, pero obviamente una persona que protagoniza un accidente de tal envergadura, cuando esté demostrada la mecánica del hecho, va a tener que renunciar. Luego, una vez que determinemos que manipularon las pruebas (NdR: se refiere a los bolsos) y que implantaron testigos falsos, vamos a pedir la prisión preventiva para evitar que siga entorpeciendo la causa. Y esperamos que la hagan efectiva.