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#CositortoANetflix
La gran estafa
Foto: La estafa de Cositorto llevará a Villa Maria a la pantalla universal de Netflix.
Una productora nacional trabaja en reconstruir para Netflix la historia de la estafa del tipo Ponzi más grande en lo que va del siglo: “La pirámide del fanfarrón” Cositorto, como tituló el año pasado revista El Sur. Mientras, en Tribunales se escriben nuevos y determinantes capítulos.
Publicada el en Crónicas

Vehículos del tipo Van de pasajeros trasladan un ejército de camarógrafos, fotógrafos, iluminadores, sonidistas, productores, actores, meritorios, asistentes de todos ellos… Por las calles de Villa María los sigue de cerca un camión con los equipos, las herramientas y los elementos necesarios para armar escenografías ahí donde el guion lo exige. La caravana de Anima Films detienen su marcha frente a Tribunales, El Diario o un centro vecinal alquilado previamente y ploteado con los símbolos de Generación Zoe, para simular las oficinas desde las cuales operaba el clan de los Álvarez, los lugartenientes locales del ideólogo Leonardo Cositorto y su socio principal Maximiliano Batista.

Cuando ese último set de filmación estaba en preparación, en barrio Mariano Moreno, todo parecía tan real que los vecinos llamaban a los medios para avisar que Zoe estaba de regreso. Nada de eso. El fanfarrón y los 30 partícipes necesarios de lo que la fiscal Juliana Companys caratuló como “Asociación ilícita” y “Estafa”, siguen procesados, en su mayoría alojados en Bouwer. El único prófugo, el ex juez federal Héctor Yrimia, continúa enfiestado en yates que surcan las aguas de los emiratos.

Toma uno

Companys mira la cámara y dice que empezó a investigar a partir de las notas que iba publicando El Diario. Desliza que envió a uno de sus colaboradores de incógnito a la sede de Generación Zoe y su Universidad del Trading, en la segunda cuadra de la céntrica avenida Alem, “para que solicitase un crédito”. A su regreso, el espía le dijo algo así como: “No, Juliana. Ahí no prestan plata; ahí ponés plata, dólares, y te pagan un interés del 7,5 por ciento mensual y hasta 10 por ciento mensual si acercás a otra persona, cuando los bancos no llegan ni al 0,5 por ciento”.

La fiscal puso la lupa sobre organización, pero no podía proceder hasta tanto tuviese una denuncia de algún perjudicado. Por entonces, Cositorto y Álvarez bajaban retornos desde la cima de la pirámide, por lo que las bases estaban firmes con ellos. La investigación avanzaba a la espera de que se cortasen las líneas que trazan el esquema Ponzi. El expediente reunía unos 300 folios (hoy son más de 80 cuerpos, de 200 fojas cada uno, que contienen casi 190 denuncias y más 500 declaraciones testimoniales).

Cuanto la representante de la Justicia de Córdoba tuvo ante sí a los tres primeros damnificados, su par del fuero Federal María Schiani se apartó del caso y le entregó elementos que venía reuniendo por su cuenta, como las escuchas que reforzaron todas las suposiciones y sospechas.

Una actriz que interpreta a Companys tiene que subir y bajar las escaleras de los Tribunales una y otra vez porque, evidentemente, no tiene la misma destreza que ella con los tacones.

Toma dos

Me llevan a la orilla del río. Entre los árboles hay un auto muy parecido al mío, rodeado de cámaras. Me invitan a sentarme en el asiento del conductor. Un tipo sentado en una silla al otro lado de la ventanilla del acompañante, me dice que no lo mire. Entonces miro hacia adelante y veo a través del parabrisas que una asistente hace sonar la claqueta. El tipo empieza a hacerme preguntas. Y yo (sin mirarlo) le digo que empecé a ver que personas a las que conocía renunciaban a sus puestos de trabajo con más de 20 años de antigüedad en una concesionaria, con más de 10 años de antigüedad en una clínica… porque obtenían muchos más beneficios sumándose a Zoe. Después, la Comisión Nacional de Valores me confirmó que esa organización no contaba con autorización para captar dinero, el Instituto Universitario River Plate me respondió que no existía permiso alguno para que usasen su nombre ni sus símbolos (estaban impresos en la fachada de las oficinas locales), que organismos gubernamentales de provincias norteñas y cuyanas desmintieron la existencia de minas de oro explotadas por Cositorto (él había asegurado que eran el respaldo de su propia criptomoneda)…

Más tarde me llevan a otros escenarios para seguir contando más detalles. Por ejemplo, que hubo personas en Colombia, México y Paraguay que me dieron una mano. Habían perdido familiares o prestigio o dinero a manos de Cositorto.

Hace unas semanas alquilaron la sede de El Diario y contrataron a un actor que hace de mí. No quise o no pude verlo. Mis compañeros me cuentan que el intérprete andaba preguntando cómo camino, cómo hablo… y que salía imitando mis chuecas.

Toma tres, Toma cuatro…

Hablan damnificados por Generación Zoe en Argentina, en Colombia… Uno de ellos da cuenta de la millonaria cantidad (en dólares) que su esposa puso en manos de la organización, que captaba adherentes desde lo “educativo”, lo “deportivo”, lo místico-religioso, el falso coaching ontológico… porque esta vez, la pirámide de Leonardo tenía en cada arista un atractivo diferente, era una sumatoria cuyo resultado no debía ser otro que el éxito. Todos los aspectos estaban cubiertos, todas las fallas que causaron los fracasos anteriores habían sido atendidas y reparadas.

Más allá de que la mayoría de los damnificados no acudió a la Justicia por vergüenza o temor (al no poder justificar la procedencia del dinero invertido), existen en el expediente denuncias de algunos que confiaron cantidades que van desde los 3.000 hasta los 180.000 dólares (hasta donde El Diario de Villa María pudo conocer).

Toma diez

Habla Maximiliano Batista desde la prisión de Bouwer…

Y mientras la productora procesa tanto material para que sea emitido cuanto antes por Netflix, la segunda parte del guión se escribe en el primer piso de los Tribunales villamarienses. El último capítulo da cuenta del que puede ser catalogado el segundo gran triunfo de Companys, por detrás de la detención de Cositorto por Interpol, en República Dominicana: el abogado bonaerense Gustavo Saavedra, involucrado en la Megacausa, se declaró culpable y será sometido a un juicio abreviado, que se llevaría a cabo este mismo mes de junio, antes de la feria judicial de invierno.

“Junto a la defensa se estimará la pena a aplicar”, dice Companys cuando habló con los medios de prensa. Y precisa que la jueza de Control, María Soledad Dottori, presidirá la audiencia.

Saavedra fue detenido en abril de 2022 en un domicilio de Ituzaingó, al oeste del conurbano bonaerense, y quedó imputado, al igual que los demás, como presunto coautor de los delitos de “asociación ilícita” y “estafa”. Si uno acepta que fue parte de la banda y se declara culpable…

Fundido en negro. Titulos.

Sergio Vaudagnotto
- Periodista. -