En Stockholm una chica y un chico se conocen en la noche madrileña. Él la quiere conquistar y ella se resiste. Él le dice que se enamoró y que por eso la persigue insistentemente. A medida que atraviesan un buen número de calles van entablando, de a poco, una charla.

La caminata (que al ser filmada en un largo plano secuencia recuerda a Antes del amanecer, de Richard Linklater, la argentina Tres deseos, de Vivian Imar y Marcelo Trotta o Buscando un beso a medianoche, de Alex Holdridge) es acompañada de música indie y mostrada bajo un tono azul.

Él consigue que ella vaya a su departamento. Por la mañana la historia parece dar un giro rotundo: el escenario se torna de un blanco tan luminoso que molesta, los personajes (de los que no se saben sus nombres) parecen ser muy diferentes a cómo se mostraban por la noche y el tono jocoso y romántico deviene en drama.

“A la hora de conseguir lo que quieres, lo haces a través de la seducción o de la violencia. En este caso, la violencia está muy intrínseca en la seducción y queríamos hablar de cómo utilizamos la violencia en nuestras relaciones. Eso es irremediable, es un trabajo, tienes que manejarlo bien, tienes que intentar no hacer daño a la otra persona pero somos seres violentos por naturaleza y cuando se te va la mano, sale a la luz”, dice Rodrigo Sorogoyen, joven director español, conocido por su trayectoria en televisión y por su opera prima 8 citas. Sorogoyen consiguió llevar este proyecto adelante y concretarlo gracias al crowdfunding (microfinanciación masiva por suscripción), ya que la situación financiera de la cinematografía hispana no pasa por un buen momento debido a los recortes presupuestarios, fruto de la crisis y las políticas de ajuste.

Stockholm, que fue rodada en 13 días, debe su título al síndrome del mismo nombre e intenta ser una crítica a las enfermedades de hoy. En palabras de Sorogoyen: “El individualismo en el que estamos metidos, un egoísmo extremo y una sociedad de consumo rápido y de triunfadores y fracasados. Toda esa mezcla es muy peligrosa. Vivimos en un capitalismo salvaje en el que tienes que ganar y da igual quien pierda”.

El film, protagonizado exclusivamente por Javier Pereira (Frío sol de invierno) y Aura Garrido (Los ilusos), logra su objetivo: shockear y desparramar disparadores reflexivos. Lo malo es que se agota en una sola visualización.

FICHA TECNICA:

Stockholm. España. 2013. 90’

Dirección y guión: Rodrigo Sorogoyen

Intérpretes: Javier Pereira, Aura Garrido